Blockchain “cadena de bloques” es una de las tecnologías emergentes más revolucionarias que está involucrada en la transformación digital, se trata de un almacén de datos descentralizado y estructurado por nodos, el cual permite el intercambio de datos sin necesidad de que intervenga un tercero. La particularidad de esta tecnología, además de su estructura, es que otorga un nivel de seguridad alto debido a que la información transferida se encuentra completamente protegida debido a los códigos criptográficos que involucra, los cuales son muy difíciles de decodificar o descifrar para aquel que quiera acceder a la información de modo abusivo.
“El Blockchain fue creado en el año 2008 por Satoshi Nakamoto, un seudónimo usado por el creador o creadores del Blockchain. Hasta el momento se desconoce el nombre o nombres reales de sus creadores”
A esta tecnología también se le compara como un libro de contabilidad, el cual contiene todos los movimientos efectuados por un usuario, solo que en este caso se trata de movimientos digitales. De acuerdo con la Guía con lineamientos Generales de Tecnologías emergentes de MinTIC, el Blockchain es “un libro de contabilidad que mantiene un registro de cada transacción que se produce en una red que permite un intercambio descentralizado de datos confiables: un “libro de registro compartido” (2020)
Dado que Blockchain funciona por nodos, permite que muchos usuarios puedan trabajar en red para intercambiar información, y son estos usuarios participantes los que aprueban y validan la información que se transfiere. A continuación, se presenta una gráfica que ilustra su funcionamiento.
Ahora bien, esta tecnología ha sido usada principalmente para el intercambio seguro de criptomonedas las cuales pueden operar como cualquier otra divisa internacional, pero sin el control de un ente o banco central, sin embargo, su versatilidad no solo es aplicable en el entorno de inversión en monedas digitales, pues también se han identificado un sin número de funcionalidades y aplicaciones prácticas, por ejemplo para la identificación digital como se hace en Estonia; para fines políticos como una plataforma electoral en Ucrania; en Hong Kong se utiliza para plataformas educativas y para invertir en la creación de empresas, y en toda China para la infraestructura de software y crear ciudades inteligentes; en Honduras para la lucha en el fraude del título de la propiedad de la tierra; y en algunas partes de Estados Unidos se usa para Sistemas de Gestión de registros estatales, así como para el almacenamiento de estos registros, y también para el Departamento de Seguridad Nacional. En este orden de ideas, países como Estados Unidos e incluso Reino Unido están aplicando la tecnología Blockchain para almacenar y gestionar sus registros, en este sentido esta tecnología revolucionara lo que conocemos como Gestión Documental.
Varios son los efectos de esta tecnología en nuestro campo de acción, ya que varias actividades de la gestión documental se transformarían. Por ejemplo, hoy en día los documentos electrónicos tienen valor probatorio, y se consideran auténticos, íntegros, fiables y disponibles gracias a los metadatos, índice electrónico, firma electrónica, estampado cronológico y otras medidas, sin embargo, al integrar Blockchain a un documento no solo se validarían estas características tan comúnmente representativas, sino que se incrementaría el nivel de seguridad en la gestión de los documentos, dado que todas las evidencias digitales de cambios y modificaciones en los documentos se podrían identificar, rastrear y preservar. Adicionalmente, todos los nodos (usuarios) relacionados con el documento tendrían conocimiento de cualquier movimiento o cambio.
El Blockchain es considerando como un garante de la autenticidad documental y como una herramienta contra la obsolescencia tecnológica. Además, apreciaríamos el documento no como algo plano, sino como algo inteligente que a través de metadatos [sea] posible indicar a un documento cuando deberá destruirse o conservarse, marcar los calendarios de conservación e incluso cuando deberá transformarse para adecuarse a las nuevas tecnologías existentes.” (nomadat, 2021)
Un ejemplo de la aplicación de esta tecnología en los archivos, lo podemos ver en el Archivo Nacional de Reino Unido, en el cual desde el año 2018 sus investigadores comenzaron a estudiar la posibilidad de su aplicación. En este caso, Mark Bell, investigador digital senior y miembro del equipo de investigación de The National Archives, junto a sus colaboradores publicó su investigación “Usando blockchain para generar confianza en Archivos Públicos” que básicamente describe un proyecto llamado ARCHANGEL enfocado en la aplicación de esta tecnología para registrar sumas de verificación y otros metadatos derivados de registros físicos o digitales escaneados, permitiendo la verificación de su integridad durante períodos de tiempo de una década o un siglo. Estos datos se conservan permanentemente a través de la distribución de igual a igual y la verificación de consenso sin la necesidad de un tercero de confianza.
Es importante reflexionar respecto a los cambios que traería la aplicación de esta tecnología para la gestión documental, pues en varios estamentos se afirma que el Blockchain es una tecnología más disruptiva que la digitalización misma, y a nivel mundial se han desarrollado proyectos para usarla en diferentes aspectos relacionados con los documentos, como su valor probatorio, seguridad, intercambio de datos y preservación.
Autora: Paula Navarro Alvarado
Revisión: John Gutiérrez Garzón
Referencias:
Nomadat. (2021.) Blockchain como forma de preservar archivos digitales. [Blog]. Recuperado de https://www.normadat.es/noticias/blockchain-como-forma-de-preservar-archivos-digitales
Ministerio de Tecnologías de la información y las comunicaciones. (2020) .Guía con lineamientos generales para el uso de tecnologías emergentes. Recuperado de : https://gobiernodigital.mintic.gov.co/692/articles-179148_Guia_Tecnologias_Emergentes.pdf , Pág 28